viernes, diciembre 03, 2010

It could be sweet

Please don’t wake me, no, don’t shake me, leave me where I am, I’m only sleeping…


Wake me! Shake me! Please don’t let me sleep to long…

(Siempre me cuesta recordar esta parte, y siempre quiero recordarla cuando canto la anterior).


De los Beatles a Lou Reed en un tempestuoso paso por el centro de interés de mis rayos caóticos, acá. En este punto específico y dicotómico de cosas que se caen rendidas ante la palabra destrucción.


You can free the world and you can free my mind… just as long as my baby’s safe from harm tonight


La voz que grita me dice que escriba;

del silencio y ausencia por pura presencia… del ruido de cadenas rompiéndose… del sonido de un torno agujereando un diente, de rayos está lleno este punto. De hartazgo.


Distracciones.

De las dicotomías que no son más que las infinitas expresiones del movimiento. Todo remite al movimiento, al porque puedo, al mal timing metido en una bolsa, metida en la mochila que llevo, que cargo…


Boy! You’re gonna carry that weight… a long time…


Sí, siempre quise decir esto.

Ahora digo esto.

Las voces de mi cabeza hablan. Y yo entiendo.


El papel; el papel imaginario… la cosa con estética de papel que me devuelve el monitor; lo creable, el lienzo blanco… todos juntos que son uno que son plataforma y falta de imaginación.

Quiero otra idea distinta al papel. Quiero otro formato que el más práctico. Quiero distancia. Quiero gritar.


Quiero gritar que amo mi prisión que puedo llamar sistema que puedo llamar camino, que puedo llamar voluntad (will). Peyorativo y su opuesto innombrable y el punto en que son el uno(cero) cargado(a) de moral, encerrado en letras, interpretadas en conceptos, dicotómicos. Quiero más símbolos para dar más información de los ritmos. No estoy satisfecha con el sistema de puntuación. La dicotomía está en el lenguaje. No sé si el Universo será dicotómico, pero yo no puedo salir de ahí.

Dejá Vu


Time is attention(does not exist).

I’m just trying to understand. Time and now and me.


And she wants order… order… my chaos is asking for order…. (don’t forget to breathe)

Now I’m looking for you(or anyone like you).


I can desire but I can’t own, nothing’s permanent (like a long forgotten dream).

sábado, noviembre 06, 2010

Acontecido

El polvo de palabras está mezclado en acuosa unidad, unido
Es torbellino encucharado en sálpicas microunidades del todo disgregado
Y yo queriendo decir algo tan simple
que no tengo más remedio que encriptarlo en complejas palabras de intrincada sintaxis, de
subordinadas estrofas en específicas formas de específico orden que tratan.
Tratan se acomodan sosteniendo el contenido revuelto cuchara de plena acción.
Decir.
Y dicen como dice director de orquesta a los orquetistas intérpretes
Con el anhelo de ser expandido hasta la emoción del conjunto.
Palabras bailo en sonidos a velocidades y soy forma.
El Universo me mima desde la mañana
y me hace acordar a la noche
pero con olores tenues que amenizan
que despachan la producción del día, que vacían la mirada
que convierten el recuerdo en tiempo, en instante, en todos los tiempos.

miércoles, octubre 20, 2010

Un festín para Freud

Salgo de mi habitación atrasadísima.

A la tercera vuelta voy a descubrir de qué color quiero pintar mi pared.

Salgo atrasadísima y bajo a la habitación secreta que hay en mi casa.
La habitación de no ser por la ventana podría ser una piscina pequeña para ser piscina, normal para ser habitación, pequeña para ser océano. Por esa habitación pasa el subte y veo dos gatos ¿eran gatos? creo que eran más grandotes y gordos que gatos... sabía que me estaban observando,,, no a mí, al subte, tomando notas, reportando conductas.
Diego está en la estación de subte de la habitación oculta de mi casa casi piscina un poco menos que habitación y un poco rara para estación de subte y me saluda con su eterna simplicidad y calma.
Creo ya haber visto este lugar... en algún otro sueño, le comento... esas escaleras chiquitas, incómodas, con tramado de reja ondulante a rombos oxidados.
Llega el tren, viene viniendo y tengo que llegar a Corrientes y Ángel Gallardo. Ahí viene el subte pero no para en esta estación, lo veo irse a toda velocidad en una curva de cadera hipnótica.

Necesito ir a otra habitación, necesito encontrar la forma de tomarme el subte.

Corro por las finas e intrincadas escaleras -desearía haberle contado a alguien el laberinto del shopping que soñé aquella vez-. Encuentro el sonido del subte y corro hacia él; los gatos flotantes y observadores me miran con calma, pasivos... atentos. Me siguen mientras recorro los distintos espacios del subte.
Ahora me encuentro en otra estación: parece Plaza Miserere pero más finita. Llega el subte lleno de personas con cabezas de globos, que no dan miedo valga la aclaración; todo tiene mucho color saturado y sonido a hule y un poco de olor bizcoso y música burlona.
Es necesario subir muy rápido al subte.
Logro ingresar apretada entre hule a uno de los vagones y veo que uno de los gatos observadores golpea su frente con su palma asumiendo que le espera un largo viaje aún.
Son 4 estaciones las que logro recorrer y me bajo en una asumiendo que me tomé el subte equivocado... no reconozco las estaciones.
Estoy en una habitación con una pared color lavanda o más bien gris vioiláceo; Diego está jugando con una agujereadora sentado adentro de un estante. Me invita a tomar mate a la bañadera.
-No. Tengo que llegar a Ángel Gallardo antes de las 8, le respondo.
-Mate y hule me distraen y cuando ingresamos a la bañadera no era otro lugar más que la piscina oculta de la habitación de aparte de mi habitación de mi casa. Las vías de subte estaban instaladas y los gatos me seguían observando.
-¡Tengo que tomarme ese subte, ahí viene!- Le grito a Diego mientras lo saludo sacudiendo mi mano.
Me acerco a uno de los gatos observadores y les pregunto si saben cómo llegar a Ángel Gallardo, les explico que estoy muy atrasada y ellos me explican que yo no debería estar viéndolos, que no me pueden ayudar, pero que claro que conocen la respuesta. La gata hembra pone más agua para el mate en su hornalla, esa que le flota por detrás y enciende con la mirada de deseo exacta.
-Suerte, ¡nos vemos! Replica Diego a lo lejos como si él se alejara en vez de yo, como si la habitación fuese la que se está moviendo. Nuevamente avanzo cuatro estaciones y para mi sorpresa comprendo que llegué a una habitación que me parece familiar, que podría ser el lugar que busco, pero ¡Oh!, el color lavanda, el agua, el calor, el olor distante de la habitación que está pero no está. Estoy nuevamente en la habitación que trae adjunta una oculta piscina bañadera habitación estación de subte.
Despertador.

domingo, octubre 10, 2010

¿Qué parte del espacio es el placard?

Nunca me gustaron los placares... me parecen lugares incómodos y torpes... no voy a negar que cuando veo uno bien ordenado siento una inmensa pereza por el bardo que eso implica. No acepto las condiciones que me demanda el placard para mantenerse en su correcto funcionamiento.
Cuando me di cuenta de esto fue que le saqué las puertas, pero esto no me fue suficiente y pedí que se me construyera un gran mueble sin puertas ni compuertas del tamaño de toda una pared de habitación, con un barral al medio.
Mi placard comenzó a ser placard y bibliotecca y baulera y mesita de luz y botiquín de baño y escritorio y mesa para comer.
El placard dejaba ver toda mi ropa... es un lugar muy privado.
Ahora mi gran mueble está partido en pedazos y está siendo reutilizado por esa parte de mí que no convive conmigo pero que siempre está ahí.
Y yo tengo la casa ordenada.... y no sé qué hacer con el placard. Tiene puerta, tiene cajones, infinitos estantes con ropa mal doblada, caída, retorcida, un poco en el piso, un poco puesta.
Conocerme por mi placard no es conocerme.

knives out - Radiohead

I want you to know
He's not coming back
Look into my eyes
I'm not coming back

So knives out
Catch the mouse
Don't look down
Shove it in your mouth

If you'd been a dog
They would've drowned you at birth

Look into my eyes
It's the only way you'll know I'm telling the truth

So knives out
Cook him up
Squash his head
Put him in the pot

I want you to know
He's not coming back
He's bloated and frozen
Still there's no point in letting it go to waste

So knives out
Catch the mouse
Squash his head
Put him in the pot

sábado, octubre 09, 2010

almohadones

... un cierto vacío de lo que no quiero decir porque no me nace decirlo porque me faltan ganas de decir cosas que pienso que sería lindo escuchar, claro, no decir, escuchar, entonces cuando lo que quiero es escuchar y no precisamente hablar es cuando tengo este deseo encontrado, extraño, ambivalente, desconcertante, algo como esa expectativa que me pica ahí, donde no tengo ni hongos ni picaduras pero me quedo muda, simplemente no digo nada porque quiero escuchar algo que no suena y como lo que está en la puerta es demasiado gordo para pasar por ella genera un embotellamiento eterno de todas las palabras que no quiero decir, porque las quiero escuchar, porque quiero que otra boca diga las palabras que no tienen ningún sentido en la mía porque ni siquiera pasan por la puerta de entrada y para colmo van en sentido contrario haciendo que hace días intente decir algo que no tiene nada que ver con esas palabras y solo recibo señales de movimiento, de puja en las compuertas, de falta de deseo de comunicarme con el universo circundante... un hermetismo voluntario a causa de una voluntad desconocida y andrajosa, que se atora en el gancho que sostiene el tiempo de otros a velocidades de caída diferente a la mía y yo solo quiero saber no-esperar y en el fondo lo estoy logrando bastante bien y no es que sea esfuerzo sino que es la nueva voluntad que quiere vomitar los restos grasos de la otra que le están tapando la puerta de entrada y por ende mi puerta de salida pero me falta el vino que me ayude a deshacerlo y me falta hablar de lo que nunca quise hablar y convertirme en un ser vulnerable, tal vez hasta inabarcable, pero definitivamente yo y completamente intención pero para hablar necesito esas palabras que me permitan desatorar lo que ya está desatorado pero duele porque no pasa pero ya está pasando a su vez y no es algo que no tiene retorno y es algo que quería pero a la vez le temo pero a su vez no lo conozco y no sé qué esperar porque en realidad no espero nada, y eso en el fondo significa que ya no le temo, es solo un deseo de la posibilidad de una de las tantas formas en que se va a desarrollar el desencadenamiento, en que va a dejar de ser mordaza y excusa y valor intocable y base indiscutible y todas esas cosas que me hacés ver y que quisiera no nombrar sino deformar para dar nueva forma o una nueva soledad que se llame meditación o caminata o todo es que quiero ver para ver si es lo que creo que es y así tal vez explorar nuevas formas que todavía no se me ocurrieron y eso explica claramente por qué necesito una musa... soy una escritora que no quiere escribir porque no está escribiendo sino creando en el mundo físico, gestando en el mundo intelectual y estoy un tanto desasociada de lo que implica sentimientos y emociones al punto de que siento que podría controlarlas o decidir por ellas, de todas formas sé que eso no es posible y me libera... el asunto sucedió cuando me di cuenta de que no estaban tomando decisiones basadas en mí sino en alguna fantasía que supe crear y que hoy no tengo polvo mágico para continuar, quiero escribir la nueva fantasía donde...

viernes, octubre 01, 2010

Lo quiero ya! - Sumo

Hasta que choque China con África
te voy a perseguir,
sería bueno que pidieras
que la tierra se mueva
hasta que China choque con África
te voy a preguntar:
No sé lo que quiero, pero lo quiero ya
si yo fuera tu esclavo te pediría más.
No sé lo que quiero, pero lo quiero ya,
si fuera tu esclavo te pediría más.

Nada te ata a leer la novedad,
nadie te pisa, nadie te invita,
ni te van a chupar.

No sé lo que quiero, pero lo quiero ya.

No sé lo que quiero, pero lo quiero ya,
no sé lo que quiero, pero lo quiero ya,
No sé!

lunes, septiembre 20, 2010

Lo que nunca voy a decir(te)

Silencio.
El ruido de la lluvia cayendo por algún lugar bien planeado por donde debe fluir el agua de lluvia para no perturbar nuestras secas existencias dentro de jaulas-edificios de las que salimos grises-pájaros con prótesis impermeables-plásticas para no enfrentarnos ni siquiera con lo que corremos de costado para así decidir en nombre de El Clima, todopoderoso impersonal de magnánime imponencia. El humor del tiempo. El clima es el humor del tiempo. Y queremos a todos los humores del tiempo, queremos experimentarlo todo. Apasionado el hombre con Su Magnificencia: alabanzas, artículos, danzas, gritos, recuerdos, blasfemias, clichés. Nos permitimos integrar su existencia dentro de mitos con calles... pasajes tal vez, pintorescos o terroríficos, de plena acción o de tiempo-emoción detenido, lo ponemos bajo nuestro dominio. Con sonrisas o con lágrimas que tienen que ser adivinadas por entre la cortina de Verdades que Clima nos impone. Hasta que jugamos a ser el clima y convergemos nuevamente en el seco-artificial-clima. Y hay más humedad de la que quisiéramos pero a su vez nos alegra su presencia, recordamos lo muy felices que son las plantas en este momento, yo siempre recuerdo eso. Siento desapalmazarse al aire, siento al Clima ir con la violencia de lo que es demasiado rápido para mis ojos y llamaba agresivo contra el cegador humo de polvo de tiempo de humano que está expandido a nuestro alrededor, contra la inmóvil tierra cubierta de pesado cemento rígido, y también si prestamos un poco de atención podemos ver a la violencia rebotar hecha partículas más pequeñas luego del impacto y tal vez y solo tal vez somos afortunados y podemos ver cómo ciertas partes de ella se desintegran y se pierden en un charco volviéndose parte de él (ella, él) o quizás sea esa que se mete por el único huequito que tenía el bien elaborado equipo marchitador de piel. Algo así como curitas eternas.
Nada de esto pasa dentro de jaula.

lunes, septiembre 06, 2010

La vuelta de la totalidad



Me intimida tanto movimiento

Se impone la exposición

sin permiso, sin gentilezas

Se me pone la piel de gallina

al sentir el contacto con todo lo demás

y se me erizan los pensamientos

cuando pienso en perturbar su quietud

su imponencia

y lo siento cobrar fuerzas

convertirse en peso hacia algún lado

donde la gravedad soy yo

Pero si estamos ambas

la gravedad y yo suficientemente quietas

tal vez nos confundan con una sola entidad

y pasemos desapercibidas de los ojos curiosos

sin siquiera percibirlo.


Soy paraíso en la tempestad amarilla

Pero soy oasis a los ojos que no saben lo que buscan

y me convierto en el fondo del mar

azul profundo e inexplorado

quietud de astro

movimiento del cosmos que una mente inventó

curiosidad naranja.


De mi cuello parten las palabras

que ya no soy capaz de decir

signos gordos y densos con tejido adiposo

que me fueron extirpados

Mis más mágicas definiciones

todas presas en el corazón de una piedra

La no voluntad.

La inspiración.

La musa.


Porque érase una vez

que yo me oía a mí

y ahora no me quiero callar

porque me escucho

Y una vida menos para la felina y un poema más

que duerme y se alimenta

y continuó en tu ausencia

con tus palabras

la impronta, el sello de calidad

buscándose en este nuevo lugar

volviendo cada mañana al azul oscuro manantial

resurgiendo en cada Luna llena

como la voluntad de los soñadores anhelantes.


Y soy el peso en la Tierra

y escavo sedienta de grasa

de centro de carne extirpada

y la carne y yo nos fecundamos

y estallamos al astro

y somos supernovas.


Me miro las manos con desconcierto.


érase una vez el día después.

estaba el día y yo después

cuando mis manos lograban apropiarse de algo

y comía o fumaba algo,

salía en la foto y entraba en el día

pero mis manos antes o después, o en el día

consumían el respectivo objeto

y la presión pasaba a mis ojos

y no sabía qué hacer, y dubitaba, experimentaba

y después me di cuenta de que lo que en realidad veía

era el fondo de mi nuca

y que la presión era fruto del sentido inverso de mi visión

así llegue a la vía láctea

y conocí a la Luna.


Un azul oscuro manantial

Una vida menos para la felina y un poema más.

viernes, agosto 20, 2010

Esto es lo que puedo imaginar de mí:






... ,
. E como, , ción ,
, , , y . R . Rasco los cielos, ; descubro

¡Clin! ( - )

tal vez [...] tan -de los tallos-, ...
de entender . Silencio: .


sábado, agosto 07, 2010

Retroactividad

Sola.


Mate.

Parlantes.
Fuerte. Muy fuerte. Cerca, Muy cerca.

Charly.
Unplugged.
Fuerte. Muy fuerte. Cerca, muy cerca.

Mate.
Caliente. Bastante caliente. Rico.
Ñam. Mate para uno.
Mate-beso. Beso-mate. Labios tibios, sonrojados.

Mañana. O mañana para mí.
Luz de día, el Sol está en pijama a lunares.

Estoy viviendo un recuerdo. Estoy presente en dos tiempos.

Dejo la casa de mis padres en dos semanas.

No entro dentro de mi cuerpo.

viernes, julio 30, 2010

~babitas~

Soledad es la ilusión de compañía.
el tiempo deja de existir y la receta dice "atención".
la expectativa tiene cara de iamginación; lo irreal no importa cuando es imaginario.
la barrera entre el entendimiento y la hostilidad está pintada de color creencia y tiene una guarda en color elección, barnizado al tono necesidad.
soy la inestabilidad hecha de ojos abiertos y pupilas dilatadas. Soy la no-contemplación.
Soy las demandas de los otros transportadas por la inocencia del cartero... Soy la víctima de lo que el cartero le hizo creer a quien redactó. Soy el juego de alguien más:
Soy la carta que tengo en mi mano.
Soy palabras leídas e interpretadas; soy palabras escritas en tinta invisible y soy las palabras que me dijo un autista desde su soledad verbal.
Me sacudo la ansiedad de mis manos -justo lo que no quería-. Soy carta que no quiero leer.
Soy lluvia borrando las palabras que fueron no-leídas por mí. Soy la alteración de un recuerdo contado por otro y redactado por un aquél. Soy la evaporización del acontecimiento real que se supone que debo caracterizar. Soy la expectativa fallida de alguien más.
Soy la distancia entre las palabras escritas y lo que son ahora mojadas y desatendidas.
Soy amor sin dolor ni culpa.
Soy la que nadie espera de mí.
Soy la que no conozco y me sucede porque me creo, sin darme cuenta siquiera.

domingo, julio 18, 2010

Vecino

Estoy masacrándome la cabeza: trabajo conmigo, ejercito mi capacidad de autocontrol y mi selección de los eventos y acciones. Descomprimo fantasmas molares y los envaso en olvido.

Las palabras de quien me conoce y disfruta.

Ella lucha contra sus impulsos si quiere pero puede dejarse llevar si le parece.

martes, junio 29, 2010

Así da gusto despertarse

Algo me causó tanta gracia en un sueño que me dio risa a carcajadas sin aire y con sangre en los cachetes y lárgimas en los ojos y pataleo de los pies y fue tan gracioso que















Me desperté con mi propia risa material.

viernes, junio 18, 2010

No more thoughts for a million years

Complejo. Pero complejo... ¿Complejo como un montón de cosas coordinadas que funcionan en conjunto por un fin común? Complejo tal vez como el recuerdo del acalambre cerebral del día que se enredó ese ovillo de lana y se aprendió la lección, pero ¿qué va? Si eso no es más que un recuerdo potencialmente ficticio: oficialmente ficticio en alguna proporción. Complejo como elegir jugar con el amigo raro o con todos los demás amigos y estar sentado mirando el pasto con el caos instalado en el plexo, con los hombros tratando de esconderlo, con el cuerpo exigiendo una decisión; complejo como lo que sucede adentro de la mente.
Como si se pudiera elegir ser complejo y caminar cada día seleccionado el nivel. Como si se pudiera cambiar de mundo y que un alfajor inesperado o un susurro desconcertante no llamen la atención. Algo así como no soñar, pero más rodeado de estambre agarrado con cinta de aislar con huequitos de aire.
Caminar por los pasillos eligiendo regalar una historia a quien la desea. Convertirse en la historia que alguien quiere vivir, sentirse honrado por haber sido elegido... Oh vamos... eso solo está en tu mente y lo que te inventás como percepción, a lo cual llamás real, le ignorás la parte de ficción que le corresponde -a la palabra realidad-. Teorizar y no llegar jamás a conclusiones es el único camino dentro de esta jaula. Ser todo lo que sin permiso los otros deciden que seas, obvio, sin permiso, si no podemos comunicarnos entre nosotros, no existe tal cosa.
Algo así como si uno pudiera ser tan nada y tan indulgente y tan simplemente cosa que se deja ser todo lo que los otros quieren; sin juicio, sin opinión, solo relativismo y la temperatura de las manos que moldearon la forma actual de existencia. Oraciones cortas. Ideas irrefutables. Sonrisas amables. Ojos duros.
Ojos duros pero despeinados que no sanan pero acarician y se encuentran con más nada y la nada, con nada se moldea y ahora hay formas en la nada compleja de la historia que se inventó cuando se intentaba no inventar nada, nada más que ser parte de la historia del otro, aunque claro, eso solo sería parte de lo que se cree que se está haciendo.
Las palabras no son suficientes. Las palabras.

No. Pero no sé explicar dónde me paro para saber que no.

miércoles, mayo 12, 2010

El abrigo de cielo

Si yo pudiera elegir el color del cielo sería definitivamente más verde, con más para emocionar y menos para decir. Sin teologías ni falsas expectativas, sólo la expansión inmaterial del poder de los deseos que no nos animamos a contarnos a nosotros mismos, las formas complejas de las palabras sacudidas dentro de una gran piñata rodeada de niños hambrientos de instinto; un lienzo para la imaginación, libre de recuerdos o promesas.
Si yo pudiera elegir al cielo, lo dejaría peinarme la cara estirando mi expresión hasta obtener su inescrutabilidad por tanto mirarlo. Lo imaginaría accesible, pero no siempre, capaz de convertirse en la totalidad de mi pensamiento y convertirme a mí en infinita, capaz de dejarme sola hasta que vuelva a ser lo que soy siendo. Lo invitaría a recorrerme y convertirme en su inmensidad, a cambio de su nuevo color.
El cielo sería intermitente desde su creación, apagándose cada vez que se reconoce a sí mismo como nombrado, mediante un saludo al Sol.

martes, mayo 11, 2010

A thousand years - Azure Ray


I'm saving all i'm not giving
But it's overflowing, evaporating in the air
As i'm walking, i know i'm not breathing, i'm not breathing only air
It's filled with words once spoken by people everywhere
And i can hear all the whispers that have lived a thousand years
It just took me being open for them to reach my eager ears
Now they've reached my eager ears
And i hope i'll be ready
When my light, when my life divides

viernes, mayo 07, 2010

Voces

El hecho sucedió hace semanas ya y las expectativas estaban 7 a 1 por la claudicación. Las miradas curiosas de morbo eran caricias, dicen que era muy solitario.
Pero solitario en serio, no solitario de jugar a no atender el teléfono o a un buen sábado por la noche creando sin ganas. De los que tienen mucho que hablar consigo mismos; cuentan que podía pasar días en silencio y soledad y que si alguien intentaba interrumpir, podía sentir el abismo que había hasta él -y nada más que el abismo-. Te dejaba mirarlo a los ojos, yo una vez lo hice, te auguraba vértigo y austeridad, te regalaba su don. Dicen que nunca escuchaba música pero hay quienes aseguran que escuchaba su propia música adentro de su cabeza y que inclusive la vestía y que cuando hablaba, solo le importaba combinar su voz a la melodía, nada importaba la comunicación con los demás, solo seguir la música, solo seguir solo.
Por ahora no sabemos cómo va a evolucionar, están tratando de que se comunique con alguien porque es la única forma en la que van a poder ayudarlo a salir del estado catatónico a punto estupor. No quiere ayuda. O no sabe que la necesita. Tiene cara de tranquilo, pero ahora le veo la batalla en la mirada infinitamente hacia adentro que vi aquella vez que me miró pero de verdad, mirándome, atravesándome con su atención y descuidando sus compuertas para eso y convirtiéndome en un todo que es imagen de unos ojos que supe ver. Ahora esa mirada me marea y me agota los músculos y me hace caer infinitamente hacia adentro mío y verme en mí pero dentro de mí y no como si fuera yo y ver que hay miradas que miran y tratar de decirles que quiero decirles que quiero hablar, que él se comunicó conmigo a través de los ojos y que es muy solitario este lugar pero que de tanto silencio ya no sé qué decir. (me)

viernes, abril 30, 2010

Unit I, lesson I, listen and don't repeat

Mareada.
Estática y turbada como un reloj de péndulo en un terremoto.
Inestable como la luz que se ve de un tubo de rayos catódicos con estos ojos humanos.
Descompensada entre deseo y horror.
Aturdida de impactos e infrasonidos sacudiendo mi carne como martillándome el ideal.
Vértigo en el abismo que me rodea. Soy la fuga de un pedacito de existencia.
El espacio me aprieta como si tuviera exactamente mis dimensiones y se expande con las repercusiones del sonido en mí, generando un eco ensordecedor, algo ahuecado y frío.
Nace en mí lo que aprendí a llamar nada. Y si nada nace, nada muere.
Soy la ausencia de tiempo.
El cuerpo duele y la desorientación es absoluta. El eco de las batallas ajenas se acopla entre los sonidos del péndulo del reloj gritando las 12 y desmaterializando con cada golpe, una dimensión.
Mis estómagos discuten en democracia, su número no les da estatus, todo se mueve lento y espeso ahí en los debates del epicentro





















es el fin de las indulgencias.

martes, abril 27, 2010

De lo que decidas que es verdad

La autenticidad es un gesto con uno mismo.
El felino que circunda se posa entre mis piernas indias y me regala una nueva forma de latir constante y sutil.
Los discursos pueden estar hechos de palabras.
Pero los discuros, cuando aprendemos a nombrarlos, están llenos de emonciones y de exposición.
El discurso vacío es de la persona vacía.
No hay personas vacías.
A menos que todos estemos vacíos.
Yo siento. Yo me atrevo a sentir y ser la idealista que todavía cree. Y me atrevo a absorver cada décima de grado del calor del abrazo no pedido pero recibido. Soy despiadada y regalo cariño. No sé si estoy teniendo dejá vu de alguna señal mísitica o pasé demasiado tiempo encerrada.
Si el discurso está vacío es porque quien lo dice huye del contenido. Refracta la emoción, por elección o desconocimiento (o incapacidad). Ruido en mi cabeza. El discurso vacío permite la autodestrucción silenciosa y a solas.
Se perdieron las instrucciones para cuando sos visto. Oh vamos... se perdieron, ¿o las tiraste pecando de soberbio?¿Eso eso todo lo que podés hacer por vos mismo? Only "if you try the best you can, the best you can is good enough" ¿Cuándo fue la última vez que intentaste superarte a vos mismo sin preimponer el resultado desde una voluntad más verdadera y produnda elegida como lo real?
Las acciones violentas sobre otros son acciones violentas sobre uno mismo. Los nombres en forma de palabras, de conceptos, de conexión con emociones y experiencia y deseo, las formas de nombrar, los estigmas encarnados, las jugarretas de un lobo con cobardía de gato (el calor de su ronronear).
Escribr con tinta transparente, recitar emblemas, respetar el higo, decir lo que el otro quiere escuchar hasta olvidarse de lo que uno quería decir. Ponerle nombres que lo convierten en parte integral de uno imponiéndole las brutalidades de la cualidad impuesta e inculcada con la furia de uno contra uno mismo y destruir con el ahínco que genera una fruta bien dulce y jugosa. Destruir lo hermoso, no exponerse.
Dar sin esperar recibir. Dar creyendo que es lindo que haya idiotas como uno en el Universo. Dar con la idea de compartir los propios colores y aprhender nuevos, dar hasta lo que más importa. Compartir la experiencia.
El gato se estira y decide caminar liberando electrones rascándose previamente el lugar donde le pica incesantemente.
La sinceridad nos expone a ser nosotros mismos. La sinceridad con uno mismo. Las idealizaciones del yo, todo para después decir que no existe y esconderse más aún en el discurso creado para ser el discurso que los otros quieren escuchar para lograr la aceptación e impunidad de regalar mierda con moño, y engaño con creación por supuesto sin importar en absoluto ver a la nena jugando con mierda creyendo que la misma aspira a ser zen con esfuerzo y amor propio. Lecciones de vida en la etiqueta que venía enganchada al moño donde le regalaron la mierda. Lecciones para los demás.
El gato es llamado por su naturaleza y canaliza a través de su colon todo lo que la nena recibió entregándole a cambio la responsabilidad de limpiar y recordar que si huele mal, el instinto es sabio.
El juego del karma se termina cuando se lo manipula. El juego de crear el Universo no existe cuando no se es auténtico aunque más no sea con uno mismo. Las contradicciones entre los discursos y las acciones hacen de personas, despreciadores; de lobos, pobres perros locos que giran sobre su eje tratando de alcanzar fronteras que no existen porque son la mierda que les regalaron bajo la etiqueta de lo que querían; mortales vestidos de mártires que no quieren monumentos a su nombre pero sí la compañía de los engañados que creen estar siendo fieles compañeros.
Suena el timbre, el gato se distrae, ¿en qué estaba?

miércoles, abril 21, 2010

Compulsión

Quiero decirte todas esas cosas que no estoy segura de querer decirte y preguntarte si querés que te las diga pero sobre todo preguntarte antes de decírte -aunque, claro, ya tendrías que saberlo- si quizás un día nos vamos a arrepentir de lo que dije porque si eso no era lo que quería decirte pero ya te lo dije entonces todo es distinto y todo sabe a abismo, a medio umbral y solo tengo un pedacito de tierra calentita.
Y para cuidar mi pedacito de tierra calentita es que me hago fertilizante en polvo de deseo y es que me llevo a mí misma a las garras de lo que me duele y de lo que no deseo y de lo que no elijo porque solo así puedo roer algo de la superficie que me fue dada como hogar.
Entrego el secreto, acepto la muerte, muero la vida.
Pero vivo una muerte intensa y apasionada llena de magia y nudos en la garganta que se olvidan de a ratos de presionar y me dejan tragar para no tener que escupir y decirte todo eso que no sé si quiero decirte porque no sabría si es por impulso desgarrado de una mente acoplada o si es todo lo que jamás me atreví a soñar.
No quiero forcejear el ataúd porque ssría incluir a mis deseos en la mediocridad de la muerta vida, llena de espantapájaros y desgarradientes cubiertos por escenarios lúgubres y uñas rojas y tu mano saliendo desesperada de entre medio de la tierra, pálida, quizás muerta.
Tu cuerpo que lleva tu calor está lejos, tanto como continúen mis deseos hechos tierra.

viernes, abril 16, 2010

Ansiedad

Saber que estás. Conocerte carnalmente hasta lo más íntimo de mi ser. Eso. Hasta lo más íntimo. Y nada más. Hasta el límite que te imponen las bacterias que hacen fiesta en mi garganta. Dialoguemos. No puedo hablar. Prácticamente. Una cámara de fotos se posa en el borde de nuestro ser desde el ángulo de mi ganglio y me amenaza con ser recordada por el resto de la eternidad de alguna forma. No quiero ninguna forma, no necesito saber más. Me pregunto qué pasaría si le sacara una foto al horror que tenemos en nuestra garganta ya que no puedo emitir palabras sonoras para manfiestar su repugnancia.
¿No sería un poco injusto con la cámara el exponerla de esa forma? Pongámosle protección de neoprene, a ver si se contagia la pobre.
Ahhhh pero ¿y si la cámara fuese alégrica al neoprene? ¿No pensamos en eso? ¿Cuál sería el mal menor?
Sería peor el neoprene, si le diera alergia empezaría a estornudar flashes.
Pero si le contagiamos angina, se le va a congestionar el diafragma y no va a poder sacar luces luminosas.
Tal vez la cámara sería feliz si en vez de angina tuviésemos verborragia.
Tal vez en ese caso las fotos en vez de cortarse por donde fueron sacadas durarían "una foto y media", o quizás las cosas de unas fotos se derretirían sobre cosas de la siguiente. El recuerdo sería confuso.
¿No es lo que buscamos?

miércoles, abril 14, 2010

Johnny be good

Si despertar fuese tan mágico como verte sonreír en forma de letras de lautaros-ivanes-lucías en pedazos de frases inacabadas y sin mayúsculas de espasmos de realidad yo me atrevería a pasar cada instante de todo lo que tengo que hacer describiéndote y contemplándote desde mi rincón oscuro perfectamente diseñado para espiar y robar y crear el Universo.
Quiero verte luchar, quiero verte peinar esa cola de caballo frente al espejo y recompensarte con tarrones de sol mayor. Quiero que se petrifique tu espejo y presenciar tu metamorfosis cuando esté tan duro que se rompa. Quiero destruir la verdad y convertirla en pasado creable.
Quiero verte afilar tus pupilas, ahora que Noné murió.
Haceme llorar con la mirada, que todo lo que quiero es tu calor.
Amiga, hermana, compañera: siéntase libre de recorrer el pasado inexistente y dibujarlo hasta que nos guste lo suficiente como para querer contarlo.
Un vómito, una caricia, una ciudadadane del mundo, dos, mate (el tuyo dulce, el mío amargo). El Universo se pliega ante vos, todo está en tus manos, tenés el poder.
Tu ejército de doncellas armadas y letradas marcha a paso firme mientras recita un poema que todavía no fue escrito.

domingo, abril 11, 2010

Mi forma

Nadie puede conocer a nadie. Alguien pone un oído en el alma de Otro. Silencio, escuchemos. Lo primero que resalta al oído, eso que quiere parecerse a una trompeta de jazz, es que hay iniciativa para el juego. Todo tiene un toque de baile, un toque de movimiento innecesario, voluntario y placentero. Empieza a sonar un contrabajo casi indistinguible al fondo del gran ruido. Entre los instrumentos de percusión logré distinguir un repiqueteo entre libroso y lanudo, con algo de arte manual. También suenan varias disquisiciones intelectuales enlatadas en la voz de los platillos, eternos intercambios variables en velocidad e intensidad, expresiones de la monotonía del fondo que sólo puede saludar al oído -que ya fue descubierto, claro- a través de ellos. Por suerte tiene ombligo y eso es sello de calidad, aún es humana. Más colores, menos palabras.

martes, abril 06, 2010

El inesperado

Danzan mortales los cuentos más perversos
y yo existo en el contacto entre sus ojos
Se encienden y retrotraen los latidos atiborrados
mientras la bebida se vuelve real acunada en el espectro de sonidos del silencio
Mi piel se contornea, se filtra en distintos rojos
toma los colores de la manta que la acobija desde adentro
Las botas forjadas han surcado las montañas a lunares
y olvidado a la Luna
han endurecido el fuelle hasta quebrar su voluntad flexible y complaciente
descarrilando los vagones portadores
Ahora sonríen al color de la explosión y se marean con el movimiento
de los confundidos hacia los inesperados.

sábado, marzo 06, 2010

War

Despertate. Hablame con tu vos.
Callate.
Necesito que te calles esta vez: no es tiempo de negociar.
Pero es que los ojos ven desde una de nosotras a la vez y cuando los tenés, no los usás.
Sabés que si vos te vieras, yo podría verte. Y a vos misma te avergüenza lo que sos.
Me engañaste con ese disfraz de juguete que te regalaron mis interpretaciones que sólo querían tratarte de forma que te agradase.
Pero vengo a hablarte de reflejo, de diferencias entre densidades, de sus complementariedades indescifrables.
Me aúno más cerca de mí, necesito toda mi fuerza,
me concentro es despojarte y destrozarte
Me llamo a armas y congrego a mis mejores vestidos
Empeño mi elegancia tomando de rehén a tu músculo.
Dame tu vida. Soy la decisión que no te atreviste a tomar.
Te conjuro tu debilidad, la nombro y la expongo, la quemo con los ojos
Te abrazo en la mejilla enrojecida
Alivio. Mis uñas te deshojan y mis dientes se impacientean
Pero todavía tengo un abrazo más para vos, quisiera hacerte mía
Atarte en mi espalda y usarte a mis fines
Voy a quebrar tu voluntad.

miércoles, febrero 10, 2010

A tomar el té

Puedo verlas. Esto se pone interesante: si puedo verlas es porque ya no son parte de mí. Cuando me extirpo puedo ver a mis pedazos saludándome, entrometiéndose en las personalidades de quienes me rodean, se expresan a través de los comportamientos de otros, cobran forma dentro de la forma de un otro y toman un color distinguible sólo por mí, su creadora y descubridora. Y ahora tengo dos personajes neuvos. Siento regocijo en sentirlas ajenas pero me persigue una necesidad docente feroz para continuar la onda expansiva. Tengo un teclado lleno de botones sin etiquetar y un panorama creado a tiempo y voluntad y magia y deseo, moldeado sin escrúpulos, moldeada yo... sin escrúpulos: me gusta este tablero. Yo traigo mi caballeriza, mi indiscutible y tupida mata de caballos achaparrados y radiantes cuando comen Sol mirando un helado de tarrón de azúcar. Soy una guerrera pacífica; soy una porcelana fría hecha sólo con las manos. Soy todo el espíritu que le falta a una estatuilla. Me doy el gusto de frenar el tiempo, corto su secuencia y me siento en una mesa ratona con mis dos extirpaciones más extremas, con los fragmentos que más me impresionó sacarme de profundo porque oscuro. Una es lo que no pude ser, la otra, la que elegí no ser.

martes, febrero 09, 2010

Libertad

Por fin mi ruido reina ante mi ruido, se escucha en el ruido al ruido mismo y se deja llevar por los caminos que sólo el ruido puede mandar al ruido a hacer. No quisiera que nada perturbe este caos de imposible serenidad definida en esa posición que adoptaste esquivando la luz que yo tanto necesito porque sin luz mi ruido no se reproduce, no se sella con fuego a mi existencia, no se desprende de mí la inocencia con que dormís.

Pero hoy te toca dormir a vos. Hoy yo tengo gusto a ensalada en la boca y algo de grasitud en la piel porque en vez de bañarme me higienicé lo mínimo indispensable para poder venir y dejar que lo que soñás se apodere de mi capacidad de expresión.

Te veo caminando solo, pero regalame un espacio, regalame la imagen de ese árbol que dibujé y no te gustó metiéndose en tu dulce sueño, en tu mirada contemplativa y abierta, dejá que el intercambio se produzca en tu andar saludable y fornido, en esas sombras negras que caminan detrás tuyo ¿Sabrás, con esa mirada apacible, que esas sombras están ahí? No importa, ellas juegan a asustarme a mí que te robo un poco de tus sueños para convertirse en mi quehacer cuando vos dormís, en mi intromisión en tu dulce e inocente sueño y eso, por eso, es que sos libre de ellas.

Gracias por esos adoquines del sueño, ahora sé que caminás por una calle peatonal adoquinada, que tus zapatillas son suficientemente cómodas para caminar por él pero que uno de cada 54 pasos que das hace flaquear uno de tus tobillos ante la fuerza de lo estático que no ha sido preparado para vos.

Volvé a hacer ese sonido de arrullo remolón, volvé a respirar profundo hasta sacarme todo el aire, volvé a absorver mi capacidad de dormir y sumila en el más preciado de los sueños donde yo no sea sino lo que no sabés que está ahí. Tal vez podrías acomodarte en una posición más cómoda, me está doliendo la espalda.

Mi yo-sombra te abraza y te enfría un poquito la espalda pero mi yo hecho de dedos te tapa para velar por tu sueño sin el cual yo no existiría. Arráncote la piel que no usás y me la llevo y me convierto en sombra que se ve como persona y vos me preguntás si tengo frío y me tapás como si estuviese a tu lado y yo desde acá te observo gentil, te desmenuzo el sueño trayéndolo a este otro plano donde vos apenas descansás, me pregunto qué sentirá tu sueño al ser invadido por su propia creación desprendida de sí.

Mi ombligo se transforma en manzana pero más oscura, será por mi escencia de sombra. Será porque buscás algo rojo, será porque ya no soy parte de tu sueño y esa sombra que te perseguía ya no puede estar ahí porque está acá y yo quisiera ver qué pasó con el árbol que no te gusta porque lo dejé ahí para vos pero ya no soy parte de tu sueño cuando me convertí en la sonbra que reía por detrás tuyo sin que lo percibieras, antes de que lo percibieras, ahí, antes de convertirme en lo que soy ahora: sólo un montón de letras que me reviven cuando me acariciás con tu mirada.

domingo, febrero 07, 2010

Fuerzas

Traés con vos la vida que viví sin saberlo; la tormenta terminó.
Te imagino caminando con la temperatura en la piel de la lluvia reducida a humedad en tu cuerpo y tu ropa mediante el mago Sol. Yo te miro con ojos imposibles y cautivados: no sabía si la tormenta no acabaría con todo lo que no me dejó ver de mí. Bienvenida. Vos y yo atravesamos la misma tormenta, ¿tomás mate?
Nuestros torrentes corren enfáticos entre nuestros dos seres, resguardándose tras los bordes externos de la conciencia.
Espero que esta vez vayan hacia el mismo lado y que te hayas puesto una buena sonrisa en la cara para sentir el viento.

martes, febrero 02, 2010

El movimiento antes del movimiento

En verano parece ser más notoria la situación conflictiva que desprenden los autos al cargarse con personas porque claro, cuando esas personas abandonan sus cuerpos para transformarse en conductores no es su tamaño y forma lo único que se altera. No conozco un solo conductor que no putee cuando está al volante. No conozco un solo conductor que no necesite comentar lo mal que conduce cualquier-otro-ser-autífero.
A mí me gusta mirar hacia afuera y despreocuparme del conductor, no compenetrarme con esa misión que no me toca, disfrutar el paseo y distraerme pensando en cómo puede ser... está ahí, juro que lo acabo de ver, la próxima vez que pase por acá voy a tener que corroborar esta información, pero parece ser que hay un árbol saliendo de una ventana en Scalabrini Ortiz al 3300, mano derecha yendo de Córdoba hacia Santa Fe. Me resulta gracioso que cuando voy en esa dirección, tenga que "subir de altura" para ir a Santa Fe cuando simplemente es evidente que Santa Fe debería estar antes que Córdoba para estos porteños-auto-malhumorados (y para todos los otros porteños también).
¿Será nuestra forma humana lo que no nos permite matarnos entre nosotros? Cuando están en formas-auto simplemente no pueden quererse o respetarse o tratarse como si fueran de una manada de una misma especie, todos congeniando. Al conducir se transforman esos humanitos ni más ni menos que en individuos recubiertos de metal y energía ajena, encapsulados en espacio y sonido, generando sus propios ruidos estomacales con la impunidad de la inexpresión facial, con la frialdad de las reglas y las señales coloridas a las cuales se les presta más atención que a los otros seres-auto. Encapsulados y protegidos por una coraza desde la cual parece que los conductores se sienten omnipotentes, parece ser como si tuvieran el motivo perfecto para volverse agresivos, o más agresivos que cuando retoman su forma-humana.
Eso es obserbable mayormente en verano, cuando el tráfico suele ir pacífico hasta que cualquier nimiedad se interpone, como una barrera cuyas astas no son provocadas por la furia del toro mecánico portante y por lo tanto se mantienen mirando al rebaño atascándose frente a ellas, a causa de ellas. Los piojos de las ovejas más grandes, mejor conocidos como la gente en los colectivos, lentamente despierta de su trance del movimiento arrullador de saber que sin hacer nada se está avanzando; lentamente mueven sus cabezas, alguno saca la cabeza por la ventana, otro mira la hora, otro putea por lo bajo y la señora de canas no cubiertas le dice a la señora con el bebé que lo corra del Sol, porque como está la ciudad estos días, seguro se da un sofocón. Tiempos eran los de antes, estos salvajes... -refunfuña a suficiente volumen para que todo el colectivo escuche lo importante de lo que dice y lo excelente persona, centrada e inteligente y maravillosa que ella es-. Los taxistas comienzan a sudar, abren las ventanas y prenden cigarrillos, cuando no cuentan y/u ordenan su billetes o engullen algo que les dará mal aliento y probablemente alto colesterol a sus ya flácidos cuerpos y sus ya encorvadas o prontas a encontrvase espaldas y sus ya hartos de nicotina dedos que también se hartan de pasar por el dial a través del cual buscan calma y encuentran todos los otros embotellamientos de la ciudad contados por un ser que se encuentra bajo aire acondicionado comiendo la comida promocional del día y a quien no se le está friendo la capa-chapa exterior por el Sol sofocante. Los ciclistas y motociclistas aprovechan el caos y se escabullen entre los pequeños espacios -cada vez más pequeños, porque es regla del automovilista avanzar aunque no se pueda, aunque sea uno 10 cm. de donde estaba antes-. Los peatones observan y ruegan porque se terminen los molestísimos bocinazos que ya empiezan a surgir y que perturbaron sus charlas consigo mismos o que hicieron llorar al niño y entrar en pánico a la vieja o esos tres que escuchan los comentarios que se hacen un taxista con un peatón. El Sol decide ponerse justo sobre nuestras cabezas. Unos minutos detenidos parecen ser más largos que kilómetros a velocidad constante.
Lo que permite olvidar el tiempo es el movimiento.
Siempre que voy en micro hacia algún lugar a mediana o larga distancia, por defecto, duermo todo el viaje, pero necesariamente me despierto cuando el micro frena ya sea por un peaje , un semáforo o baja la velocidad en un pueblo. La quietud captura por completo mi atención y todo parece ser más incómodo que segundos atrás: El aire no parece enfriar suficiente, la posición parece que va a dar tortícolis, el vecino parece invasivo y molesto porque, al igual que yo, se mueve desconcertado, la botella de agua se me cayó al piso por la interrupción y se me cayó también la toalla que había encontrado su posición radiante y complaciente luego de muchas pruebas. La quiertud no me deja pensar en otra cosa que en ella misma, como si estuviera mal y yo tuviese como misión evitarla a toda costa; como si me imperara resolverlo antes de continuar con mi tiempo, con mi dispoción del tiempo, mi velocidad del tiempo, como si avanzar me recordara tranquilizadoramente que el tiempo pasa, o me permitiera olvidar su paso por completo. Antes de disponer de mi liberación de pensamiento y disponerla librada a mi no-voluntad, tengo que moverme. Parece que el tráfico avanza.

sábado, enero 23, 2010

Instrucciones para la colición

Procure mantenerse firme pero flexible, suave pero compacto, estético pero eficiente. Asegúrese de ser contenedor ambulante capaz de transportar líquido sin que este caiga, estén abiertas o cerradas sus extremidades. Irrumpa en el medium a través de la abertura otorgada por el tirano del líquido. Perturbe su paz generando ondas expansibles más bien graves arrancando parte de su existencia al partir.

Tome la forma de quien lo contiene y procure mantenerse aislado de todo lo demás que no es usted y su nueva forma. Evite que le sucedan cosas como la de recién y no pierda la cabeza que implica filtraciones en forma de vapores y escapes aromáticos que usted no sabe percibir. No permita que nada penetre en usted, sólo puede transportarse en forma líquida hacia el recipiente que lo contiene y lo libera a la vez, llenándose a sí mismo de usted, reteniéndolo a usted entre sus finas hebras. Aproveche sus capacidades mortales.

Colocando suavemente la punta de un hisopo en un medio líquido alcóholico reposante en las paredes de un contenedor con tapa quitada, procédase a humedecer el primero sin derramar al segundo que ocupa 3/4 contenedor.

Resuélvase de forma placentera la higiene del órgano auditor.

viernes, enero 22, 2010

Envolvente

Más precisamente, me refería a esto. Ahora parece ser posible explicarlo. A perder los sueños y que eso no sea sino una fiesta de miserables. Felices miserables. Parece ser que aprendí a desear. Esos seres que éramos, estructurados, una nena que a los tres años le dice a su madre "yo quiero lo que quiero". Esos conjuntos malogrados -qué linda palabra, el poder del uso contra la tiranía léxico-gramatical del lenguaje escrito-. Esas formas ingenuas, esa resignación; si ya no se ignora, no se ha de ignorar. Pero ahora hay mucho que aprender. Ahora sé cómo no es. Tal vez pueda explicarse el Universo. Es mi camino el caminar hacia adentro. Tres espacios he de buscar. Aprendí sobre mí de cómo sé aprender y me río de mí misma hace un rato. Puedo verme a distancias inconmensurables de mí, puedo escribirme y dejarme recados para cuando vuelva, puedo imaginarme recibiendo la nota, e imaginándome en el futuro, sin saber que esa retrospectiva, me condenaría a mí misma por no haber seguido tal o cual instinto. Aprendí a reír. Y no me avergüenza. Desde el tercer espacio construído fuera de la guerra estoy: invisible a ellas, justicieras luchadoras anacrónicas. Escríbanse amenazas, dáñense por desprecio a sendos oponentes, marchítesen los recuerdos con que -hacia adelante y hacia atrás- ayer desearon y hoy descartan y mañana han de condenar a una decrépita vida en el rincón de los recuerdos a olvidar cuidar con proyecciones periódicas. Sus demandas me tienen sin cuidado. Respiro el aire del creativo silencio. Me resguardo por un tiempo de mi existencia humana, despliego el tablero conceputal: ni yo recuerdo dónde estaban los pasadizos de mi propia creación, tienen vida propia aferrada a la música de mis impulsos, al zamba de mis emociones. Pero cuando el impulso y la emoción se juntan al recuerdo, no paréceseme posible recordar una causa justificable para tal guerra. Sólo en este equilibrio entre mis miserias, es que yo podía haber aprendido a bailar. Solo decidiendo no desear por mí a la distancia, sino por mí en el hoy, al menos en mi próxima guerra, no se me podrá decir que no amé.

martes, enero 05, 2010

Estatua griega viviente

El levitar me rodea cuando no reconozco el peso de mis semejantes, cuando miro a través de lentes oscuros. Flotan ante mí las ideas ancestrales, caen ante mí las astillas de los cristales embalsamados con los símbolos ya reducidos de lo que alguien alguna vez creyó. Caen ahora, desmenuzándose entre humanos-sims, el reconocimiento y la empatía.
Me abrazo al peso de la gravedad en el espacio, me determino a reconocerme. Abrazo con mis piernas ardientes el agua hasta transformarla en las infinitas partículas de lo nuevo e innombrado dejándola penetrarme por cada uno de mis poros hasta volvernos una. El viento silba sabiduría ante los oídos atentos y humedecidos; trae consigo a las mareas y a los espirales sedimentados hasta su actual forma de circunvoluciones. La masa informe de polvo pegado adquiere firmeza con el rebotar de la luz. Soy herida en la lucha por el oxígeno: su risa me vulnera hasta lo humano, pero entonces yo implosiono hasta dejarlo sin todo lo otro que es aire; el fuego, parte de mis abrazadoras piernas, parte de un todo indescifrable ante tus ojos, ahora mi fuego, es quien va a estar encendiendo pedazos de mí.
Pero hay manos. Y esas manos irradian calor. Y esas manos reducen el espesor de su distancia hacia mí ¿Qué quieren esas manos? Y esas manos me transforman en un deseo floral que no recuerdo haber pedido. No sólo acarician mis pétalos, también me deshojan, también me riegan; pasan impunes sobre y através de mí, inescrutables, libres. Yo las dejo amasarme y jugar conmigo, yo tansformo a esas manos en manos de niño, de emocionado, de amante, de inmoral, de experimentador: Convierto mis emociones de su existencia, en parte de la misma.