¿Entonces aprendí que el tapón es más grande, o simplemente cobarde? Capaz no me importa haber retomado un recuerdo de hace muchos años o que hoy no me hayas dado un beso. Quizás muchas cosas, pero el placer de llorar andando en bicicleta y tener una no-cita en otro destino, en otro no-lugar, donde puedas conversar con los muertos que te acarician y dejar a lo bello siendo bello y respirando profundo, atrás, allá lejos, inalcanzable, adormecido, junto a tu ausencia y la incógnita que es lo único que fuiste capaz de dejar pero no fuiste capaz de explicar, si quiera de enseñar. ¿Dónde están mis zapatos? SI alguien supiera dónde están sus zapatos-... yo quisiera aprender a caminar sin ellos.
Y una mano fría y tiesa, te cuenta que ella le preguntó dónde estaban tus zapatos, llena de vida, de toda ella, de vida, de acción y continuidad y caos, le dijo adiós; y por eso tiesa, y por eso fría, esa mano de esa solitaria existencia carente de vida, porque los zapatos, porque te fuiste sin más explicaciones.
Y una caricia. [no, no llegó ninguna]
Como la descontemplación de las raíces de la nueva planta para poner atención donde siempre está la atención, en las ramificaciones, en los pétalos que se lo roban todo sin piedad, hasta que vemos las raíces y entonces ahí está la belleza pero una mano te acaricia, fría y tiesa y te dice y habla y te atormenta desde abajo, desde adentro.
La hoja 78 del libro hace que un relámpago se desate todo a lo largo de tu médula espinal y entonces tu cabeza queda desfigurada entre tu cuello y el universo, con los ojos desorbitados y una neurosis cayendo en forma de lágrima desde la no-óribita y vos sólo querías.
El oráculo hablará esta noche.
Todo para siempre decir lo que querés decir aunque busques no decirlo y decidir. Decidir la ausencia, decidir la pesadez de la no-acción, del no-aprovechamiento-de-las-posibilidades, después de ver cómo los demás entienden y vos en tu no-presenecia, que no es ausencia, haciendo nuditos de colores a ver si creen que tenés algo para decir. O a ver si creen que no tenés algo para decir.
Elegir fallar, o ya no poder elegirlo y caer en pelotudas dualidades y enojarte como si eso resolviera algo, porque los enojos no son nunca algo que está pasando, sino algo que no está pasando y lo que no-pasa es la unión de todos mis yo en una conciencia que me deje romper y avanzar. Decirme a mi misma que es enojo, cuando sé que es sólo neurosis en la mañana pero a la neurosis, no cabida, y entonces enojo, y entonces nada, instantáneamente después de llamarla enojo, porque tanto rechazo al enojo, que no más neurosis.
La disperción -o la insoportable levedad-, hasta hoy, hoy el oráculo, mañana yo.
Pero mañana es miércoles y eso nunca puede estar bien y estos números de mierda que benefician a los que se lo ganaron... pero de algo tengo que sonreir así que me sacudoy le digo sí a todo y no quiero decir sí a todo, yo no digo sí a todo, sólo una parte de mi lo hace pero estoy tan pero tan dispersa que no tengo otra alternativa que decir sí a todo y abrazar las posbilidades y aceptar mi neurosis y buen día mi amor, que te debo en un beso y un mate.
2 comentarios:
ME TOMO EL ATREVIMIENTO DE POSTEAR LO QUE ME RESPONDIÓ LU
te entiendo y no te entiendo y te abrazo y no te abrazo porque todo lo que leí puede que sea simplemente escrito por mí porque sí a todo y miércoles tienen tanta cara de lucía que me parece que de vuelta estás hablando con tu voz mis palabras y yo estoy sintiendo lo que tus letras escribieron y todo eso es historia conocida para nosotras, pero en sí tu histeria me pone en estado gatuno a mí... pasiva y expectante y meditando mientras vos tenés tu neurosis que huele muy a lucía e insisto que puede ser que simplemente estés recibiendo mis dudas y mis paranoias y las estés canalizando vos, aunque en una de esas todo esto es auténticamente tuyo (y consecuentemente mío) y sólo estoy entendiendo las cosas por la mitad. y en el caso de que esa sea la situación yo todavía me pongo más y más gatuna y miro y olisqueo y me sitúo observando la ventana con una postura excepcional. porque algo está por venir y sé que vos también lo sentís y yo le huelo desde ahora el sulfuroso olor del miércoles y de la desesperación y de la paranoia insalubre pero todavía no estoy tan segura de que sea malo o dañino o siquiera doloroso, aunque cada vez escucho más cerca la posibilidad pommm-pommm pommm-pommm pommm-pommm latiéndome adentro del oído izquierdo pero no quisiera meterte dentro de mi profecía porque lo que menos quiero es profecía auto-complida y comerme el personaje y tentar al Universo para que nos dé una lección. y me pregunto qué parte de lo que te escribo acá es una respuesta o un comentario frente a lo que acabo de leer y qué parte de lo que te escribo acá es mi propio miedo, mi propia paranoia. hay personas que no queremos cerca nuestro pero no sé si eso debería ser así... no quisiera meterme en un juego perjudicial. tampoco quiero que el Universo empieze a repartir lecciones por todos lados, tengo miedo de que eso es lo que venga. ¿necesitaremos una lección del Universo? no siento que lo estemos desafiando, tal vez podamos ofenderlo creyendo en nuestro poder pero... cuando la luna te pregunta grande y brillante y siendo la perla más hermosa de la existencia... cuando la luna te pregunta si estás segura de tu sonrisa, de tu poder, del poder de tu sonrisa, de tu mirada, del poder de tu mirada y ese vestido que te deja radiante y finalmente corona tu belleza... cuando la luna te pregunta todas esas cosas, yo no sé... pero me parece que estar segura de lo que es cierto, de lo que nosotras hacemos cierto en nuestra rayuela y nuestro mate, no es desafiar al Universo. y si la luna te pregunta si estás segura entonces vos respondés que sí porque naturalmente estás segura de tu juego, porque simplemente es entretenido. Entonces no entiendo por qué huelo que va a venir algo fuerte y doloroso y desestabilizador. no entiendo por qué escucho al Universo respirando en mi oreja, advirtiéndome. Porque no siento que esté haciendo algo mal. Oh, no: no lo siento. Decime qué es lo que no estoy escuchando en la voz de las raíces porque no entiendo qué está por venir... lo sentís tanto como yo?
Mi amor, es tanto mi culpa...
Mi amor, cadenas de azote se escuchan de mi mano a mi espalda de mi boca a tu oído...
Es que estoy perdiendo mi autoconfianza mi amor, es que admiro tanto al hombre que amo, es que ayer, y yo y mi neurosis-lu, y vos y tu ga-gatuno y expectante y misterioso y altanero tan yo, tan vos, tan nosotras que ya me cuesta reoconocer cuando es yo o cuando es vos, eso a lo que tanto le teme mi héroe en este lío. Pero él no sabe que yo ya no reconozco las diferencias mi amor, que ya no entiendo de unidades ni de yoes ni de neurosis ni de paranoias. Pero mi autoestima vida mia, mi autoestima es la que se pone en juego esta vez, jugar a encontrar algo que me recuerde lo hermosa que soy, jugar a ser la más brillante y serlo por ende, mirar de igual a igual y suspirar y decirle al Universo que no tiene que desafiarme, porque él me concedió la belleza y el poder y ahora no quiere quitármelo, siempre y cuando yo no lo deesmerezca. Hoy estuve neurótica cara mia, y la solución llegó de tu mano en una caricia que no podía encontrar y siento como nuestra tripa energética toma fuerza porque algo se viene y yo ya no sé qué esperar, y abro el juego y abrazo las posbilidades y te leo y me leo porque escribís como el gato-ga y yo escribo como la neurótica-lu y ninguna escribe nada de eso proque ya no existe porque nuestro libro es real y porque nuestra tripa se encarga de mantenernos juntas y en silencio pero yo quiero gritar y decirle que lo amo y que me mire y no tenga palabras.
Y si no va a entender este juego de mi necesidad de escribir y de hablar y de vomitar y de inventar entre las palabras los más bellos regalos, porque escribir es mi forma de regalar, entonces que no lo juegue, no voy a aprisionarlo, lo quiero en su mejor compañía y para eso lo tengo que dejar ser libre y para eso voy a esperar que esta noche hable nuestro oráculo y por eso voy a no esperar ese beso y voy a ir a buscarlo como hice escribiéndole el post anterior, porque esta vez me toca a mi y porque no puedo pedirle nada más, porque me da todo cuando menos me da, o cuando me da, o sólo existiendo y revoloteándome a cada respiro y por todo esto amiga, por la extrema felicidad que me acomete, es mi neurosis.
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